06 Apr
06Apr

¡Hola!

Este es nuestro primer encuentro y ¡de verdad estoy emocionada por todo lo que me gustaría que aprendiéramos juntos!  Antes que todo, quiero contarte (si es que quieres saberlo) como decidí iniciar un blog personal. Y espero ser breve (está difícil).

Eran más o menos las doce del mediodía y por el sol de la hora, llevaba un paraguas nuevo de color lila (de mis colores preferidos) para cubrirme del abrazador sol. Venía de regreso de la universidad escuchando un podcast, a pie. Antes de cruzar una calle lo cerré pues sabía que la brisa no me iba a dejar cruzar tranquila por ser una calle muy transcurrida; seguí mi camino, tranquila sin saber que uno de los momentos más decisivos para esta temporada estaba a punto de ocurrir...

Esperé creo yo que dos minutos a que el flujo de carros bajara, pero al ser hora punta era casi imposible, así que decidí aventurarme a hacerme entre los carros y cruzar. Cruzando, tenía varias cosas en la cabeza: meditando lo que estaba escuchando en el podcast y pendiente a no cruzarme a ningún carro. Tenía el paraguas en la mano y una brisa muy fuerte (inusual para mi) hizo que este se me fuera de la mano a la mitad de la calle(¡A LA MITAD DE LA CALLE!), y como si fuera poco, se lo llevo a arrastras directo a los carros. En ese momento venía un bus que en mi ciudad tiene la fama de ir muy rápido y debido a eso ya había se había llevado a algunas personas; en fin, para mi suerte, el conductor se dio cuenta que la brisa se había llevado mi paraguas y alcanzó a frenar a tiempo y me dio paso. Esperé unos treinta segundos para recoger mi paraguas mientras otros carros pasaban.

Tomé mi paraguas casi dañado, y seguí caminando, como si nada hubiese pasado. Aun faltaba una calle para llegar a mi casa… en ese momento me bañó una lluvia de pensamientos que en resumen era: “esta vez te libraste de ser un caso mas de los "sobusa" (la línea del bus) y solo me vino una gran tristeza y miedo. Caminé tan rápido como pude, llegué a mi casa e intenté que comportarme normal, corrí a mi cuarto y no podía hacer más que llorar, mis lagrimas eran una mezcla entre angustia y gratitud. Solo agradecía a Dios por guardar mi vida y cuando ya estaba calmándome vino a mi la idea de hacer un blog. Ahora que tenía una nueva oportunidad de vida, tenía que hacer algo valioso con mi tiempo, mis talentos y con las cosas que aprendí y que aun estoy en proceso de aprender.

Por tal razón, aquí estas en Remind Me Mariale, por un suceso que pudo ser una tragedia que olvidarías a los días, que no fue, y por eso estoy hoy aquí. Dispuesta nunca olvidar esa historia donde el paraguas voló y que me ha hecho despegar a mi para recordarte a través de historias, analogías, metáforas, frases, videos… ¡cualquier cosa que se me ocurra! , lo importante de la vida, cuanto vales y cuanto valen los que te rodean. Espero que para ti que me lees, esta sea una aventura fantástica tanto como para mi.

Siempre con el deseo de aprender...

-Mariale.


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